CyberPunk 2077
Mi primera experiencia con Cyberpunk 2077 fue un auténtico desastre. En sus inicios el juego estaba mal optimizado, con texturas muy pobres y un rendimiento tan irregular que únicamente se ejecutaba de forma más o menos aceptable en Xbox Series X y PlayStation 5. Fue una decepción inicial, ya que el potencial del título quedaba enterrado bajo los problemas técnicos.
Con el paso del tiempo, CD Projekt Red fue liberando múltiples actualizaciones y parches que cambiaron por completo la experiencia. Hoy en día, en 2025, Cyberpunk 2077 se ha convertido en un juego muy disfrutable, que logra ofrecer la experiencia inmersiva que prometía en su lanzamiento.
Uno de sus mayores atractivos es la inmersión en primera persona, que permite sentirte realmente dentro de Night City, una megaciudad futurista donde la tecnología gobierna todos los aspectos de la vida. Los personajes de la historia principal están muy bien caracterizados, con carisma y profundidad, destacando especialmente Johnny Silverhand, interpretado por Keanu Reeves y recreado de forma sobresaliente.
El sistema de combate resulta variado: puedes enfrentarte cuerpo a cuerpo o a distancia con un arsenal de armas inteligentes y tecnológicas, además de poder realizar hackeos cibernéticos para obtener ventajas estratégicas sobre tus enemigos y el entorno. Esta combinación de opciones de ataque hace que cada enfrentamiento pueda resolverse de distintas maneras.
Otro punto que ha mejorado notablemente con el tiempo es la conducción, tanto del propio personaje como de los vehículos que puedes utilizar para desplazarte por la ciudad. Al inicio era una de las mecánicas más criticadas, pero hoy se siente mucho más fluida y realista, lo que refuerza la sensación de explorar una urbe viva y dinámica.
La historia principal tiene una duración aproximada de 35 horas, pero al completar misiones secundarias, explorar el mapa y perseguir logros, la experiencia puede superar fácilmente las 100 horas de juego. Todo ello con un sistema de progresión del personaje que permite personalizar estilos de juego y afrontar los retos de diferentes maneras.
En definitiva, Cyberpunk 2077 ha pasado de ser una experiencia fallida en su lanzamiento a un título sólido y absorbente en 2025, gracias a las constantes mejoras y parches que han permitido cumplir, finalmente, con las expectativas de los jugadores.